sábado, 11 de octubre de 2014

Ella es todo (Ethos).

"Dormiré en tu boca, me perderé en ella, despertare en el cielo. La isla de tu cuerpo es el sitio perfecto para este barco sin rumbo…"

Todos alguna vez nos hemos enamorado, no conozco a nadie lo suficientemente fuerte para resistir los encantos de una mujer. Estar con una mujer no conlleva ningún riesgo, pues ellas son los seres que complementan la vida, lo que la hace perfecta en su completa imperfección.  Lo realmente peligroso del asunto es estar enamorado y a la merced de tan gloriosa belleza.

Lo diré de otra manera, las mujeres son equiparables a dormir en un risco, al borde de la caída, pero estar aun así por nuestra voluntad. Estar, porque desde ahí podemos ver y tocar el paraíso, las formas etéreas y perfectas de las palabras más hermosas materializadas y compactadas en tan poco que cabe en el corazón y, a la vez, distribuidas en la inmensidad del cielo que representan y donde es tan fácil perderse; empezar por su boca, terminar en su alma.

Las mujeres son todo para nosotros, pero solo hay una que puede voltear nuestro mundo. Ese ángel único, ese amor que pareciera que existe solo para ti y a la vez tú para ella. La luz en el túnel que resplandece para mostrar el destino al que quieres llegar, en el que no sabes que encontraras.
Pero el punto es disfrutar de la experiencia, disfrutar del amor, del “por siempre” subjetivo por cuanto depende de una simple palabra, un adiós...por ejemplo.

Ahora bien, en este punto de mi vida me encuentro con una mujer hermosa, con esa persona que sin querer asoma su rostro en mi vida, en mis lecturas, en mis escritos, en mis sueños y en mi corazón. Ella tal vez nunca planeo nada de esto, pero, y si se me permite decirlo, entró en mi vida para quedarse.
Lo que siento por ella es simplemente amor, en su significado mas puro, con todas sus letras y sin reparos. Y no es un amor de pasarela, ni algo que de la noche a la mañana se me ocurrió. En realidad, la conozco desde hace poco mas de tres años, creo que es un tiempo razonable para conocer a una persona, saber si queremos o no estar juntos y lo mas importante: saber si nos amamos.

Como dije, amo todo de ella, puede que sea peligroso amar con toda el alma porque no hay quien haya salido bien librado en tales circunstancias, pero al final, vale la pena arriesgar mi todo por ella.
Sé que ella tiene tantos miedos como yo. Sé que las mismas dudas nos hacen devanarnos los sesos, pero estar juntos es una experiencia magnifica, nada más, aparte de ella y yo, existe. Es algo así como si la tarde se detuviera y solo fuera para nosotros y se sintiese tan fugaz ese lapso de tiempo que pareciera durar solo un segundo, ese segundo que en la memoria y en algún lugar significa un “por siempre”.

Tal vez yo no soy lo mejor que pudo encontrarse en el camino, digamos que soy lo mejor de lo peor. Simplemente un hombre que ofrece amor, alguien que esta seguro de que no necesita a nadie para vivir, pero que sabe que estar con ella hace que cada día sea perfecto.


Esto no tiene un porque, así como el escribirlo. Simplemente quería decir algo y lo único que sale de la pluma es su rostro delineados a trazos, su ser esculpido entre líneas, su luz en las sombras de mis ideas. Ella tiene mi todo y de antemano disculpen si gran parte de lo que escriba, de aquí en adelante, solo refieren a ella…pero ¿Quién no se ha enamorado? ¿Quién puede juzgarme?

1 comentario:

  1. ¿Quién no ha caído a los pies de una mujer amada? Tienes mucha razón, y no hay que tener miedo de cuanto pasa dentro de uno, todo un descomunal encanto de lo que somos internamente y lo exterior, que es casi lo mismo.
    Y siempre es bueno amar a una mujer elegida.

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